DECÁLOGO PARA LA MEJORA LA CONVIVENCIA FAMILIAR
1.-
Conocer más a cada hijo en su etapa evolutiva.
2.-
Dedicar tiempo a las normas, revisarlas y consensuarlas en lo posible.
3.-
Ser coherentes, consistentes y predecibles en la conducta de los padres como
modelo para los hijos.
4.-
Explicitar las expectativas positivas.
No generalizar. Utilizar el verbo estar en vez del verbo ser para referirnos a conductas negativas, mejor “estás…”
que “eres…” .
5.-
Autocontrol. Razonar las demandas. Saber disculparse.
6.-
Facilitar la comunicación.
7.-
Posibilitar la ayuda entre hermanos.
8.-
En el reparto de responsabilidades, partir de lo que más le gusta a cada
cual. Que sean los hijos quienes
propongan lo que van a hacer, sabiendo que todos colaboramos en casa.
9.-
Ignorar lo “poco importante”.
10.-
Cuidar el tono, las “formas” de acercarnos.
Animar y reforzar cuando se hacen bien las cosas.